“…El vil egoísmo que otra vez triunfó….el vil egoísmo que otra vez triunfó…” es una frase que sea cual sea el contexto de su origen, hace sus estragos ideológicos en la mente de quienes por ser patriotas o alumnos de instituciones educativas venezolanas, cantan varias veces durante la interpretación del Himno nacional de Venezuela, aunque hoy la nación se llame República Bolivariana de Venezuela, continuamos en los símbolos pertenecientes a otros conceptos que quizá no sean apropiados a la construcción de éste paradigma único signado por lo “bolivariano” con toda la carga ideológica que esto implica.
Tal como hemos revisado el número de estrellas en la Bandera Nacional, debemos aplicar las tres erres en la valiosa herramienta formativa que es la oralidad que nutre los intelectos, valga decir las lecturas internas, cada vez que repetimos esta frase en armonía musical como canto sentido, venerado, estamos subliminalmente aceptando, corroborando, magnificando, reivindicando como un hecho perfectamente natural al “…vil egoísmo que otra vez triunfo…..” , concepto súper liberal que exacerba eso : el ego, como triunfador no como otra cosa, como triunfador, entonces eso puede desde convencernos que ser vil y egoísta es lo que nos conduce al triunfo, o sino dejarnos descreídos de un sistema que insiste en mostrarnos que a pesar de ser un bravo pueblo que rompemos cadenas viene el vil y el egoísta “nos come el mandao”.
Hace mucho que hago bulla con esto que me hace bulla, creo que es momento de dejar de hacer mas que bulla y socializar esta preocupación sobre la formación patria que estamos reproduciendo, desde la repetición de esta no tan feliz frase: “el vil egoísmo que otra vez triunfo”, que refiriera el hecho en aquel contexto histórico hoy no hace ningún favor al proceso ideológico que implica lo “bolivariano”, lo histórico lo menciono por que ya encontré defensores de la frase, así como encontré afrodescendientes que se molestaron por que J. A. Páez fue punido históricamente, por comerciar con los compromisos de libertad, tratando a sus guerreros afrodescendientes como simple mercancía de inversión con precio en oro y poder.
Cierta mañana, desde el patio vecino, en nuestro pueblo afrovenezolano, mi vecinita “Tilili” ensayaba en su lenguaje en desarrollo, en sus tiernos 5 años, el himno nacional como canción de su cotidiano, pues en nuestra escuela se canta el himno nacional al comenzar la mañana las clases de la escuela, preescolar y liceo, en las tardes la escuela y el preescolar repiten el ritual, eso durante los cinco días escolares, ella, mi vecina poetisa cantaba en ese momento de la letra del Himno así: “..EL LIBRE HEROÍSMO QUE OTRA VEZ TRIUNFÓ, EL LIBRE HEROÍSMO QUE OTRA VEZ TRIUNFÓ” realmente conmovida en aquel momento reconocí que el maestro pueblo es sabio desde la infancia. Dejemos que triunfe el Heroísmo en libertad y no el vil egoísmo, despertemos el liderazgo heroico en cada un@ y no vil egoísmo de la competitividad liberal, neoliberal, egotista. (articulo escrito por @grenhascandanga Mayita Serrano)
El Himno Nacional relata musicalmente la gesta independentista. Es un relato cantado y, por ende, debe referir a circunstancias que ocurrieron en la realidad. Saludos
ResponderEliminarEs cierto lo que dices sin embargo,nuestros jovenes lo cantan diariamente,y en la mayoria de las veces como loritos,y repitir "el vil egoísmo otra vez triunfo" actua como el lenguajen mediático que insiste en la violencia,sexo,consumismo,etc..Revolucion es evolucionar cambiando hacia lo positivo!
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